Según rememora el sitio mmateam, Don Frye y Yoshihiro Takayama protagonizaron en el 2002 una de las peleas más emocionantes en la historia de las artes marciales mixtas (MMA). Fue el combate estelar del “Pride 21: Demolition”, en el que también compitieron dos íconos de este deporte: Anderson Silva y Fedor Emelianenko.
En el combate hubo de todo lo que la afición espera, acción de la buena: rodillazos, puñetazos, patadas a granel ,con intercambios realmente impactantes entre ambos competidores que mostraron una entereza física increíble en el imponente coliseo de Saitama.
Aunque las falencias de Takayama son evidentes –se retiró sin ganar una sola pelea– los fanáticos admiraron el valor que tuvo para ponerse al frente de un durísimo y experimentado Frye, quien había derrotado a Ken Shamrock ese mismo año.
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Además, era muy común ver en los eventos japoneses de MMA a un peleador ‘freak’ como atracción para los curiosos. El del “Pride 21” fue Yoshihiro Takayama, un gigante de casi 2 metros de altura y 126 kilos de peso con experiencia en lucha libre de entretenimiento (cachascán).
Es difícil juzgar si esta es la pelea más emocionante en la historia de las MMA, pero sin dudas el combate entre Don Frye y Yoshihiro Takayama es inolvidable y el elegido por muchos como uno de los pleitos más lindos de la historia de las MMA
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